Terminamos este año 2018 muy contentos con el rendimiento y la marcha del equipo.

Nuestra llegada al Al Ahli se produjo con una tremenda carga de ilusión, pero también de responsabilidad y sabiendo que no iba a ser sencillo implementar las ideas que teníamos en mente, a un fútbol tan diferente como el qatarí.

Y así fue. Durante el inicio de Liga los resultados no eran los esperados, pero dentro del cuerpo técnico teníamos total confianza en que con el paso de las jornadas llegarían las victorias, porque el trabajo de los jugadores en cada entrenamiento era excelente, tanto  como su disposición a aprender y poner en práctica los conceptos tácticos que íbamos proponiendo.

Y no nos equivocamos. El sexto puesto al final de esta primera vuelta deja patente la evolución positiva del equipo. Además, hemos logrado sendas victorias en los últimos partidos contra el Al Sailiya y el Al Rayyan, cuarto y segundo clasificado respectivamente, lo que ha generado una gran alegría en el seno del club.

La sensación agridulce viene de la eliminación por diferencia de goles en la copa, una competición en la que también habíamos mejorado con el paso de los partidos.

Pero en definitiva, terminamos el año con buenas sensaciones. Hemos creado un grupo que cree en lo que hacemos y que lucha cada minuto del partido y eso es esencial.

Esperamos que tras el parón, sigamos en esa línea de juego y podamos competir por seguir arriba en la tabla.

¡Un fuerte abrazo!